Sabemos lo inevitable que es no sentir frustración y tristeza. La vida a veces nos pone obstáculos o eventos que nos hacen perder la esperanza. Pero Dios en sus escrituras nos dará las armas para librarnos de la adversidad y darnos la fortaleza que requerimos. Cuando creemos que se nos cierra una puerta, es porque el Señor está abriendo mil más.
Te invito a que reflexiones y busques en Dios ese valor que está decaído. Él en sus versículos sabe cómo animarte y con su palabra te dará ese empujón que necesitas para salir invicto y reforzado de cada batalla.
Mejores versículos de la biblia sobre fortaleza y ánimo:
Josué 1:9
“¡Sé fuerte y valiente! ¡No tengas miedo ni desanimes! Porque el Señor tú Dios te acompañará dondequiera que vayas.” (Josué 1:9)
La palabra de Dios muchas veces nos da los mejores consejos. Y nunca falta en recordarnos que la presencia de Dios llega a todas partes. En esos momentos donde te sientas solo y creas desfallecer, refúgiate en la palabra de Dios. Él te escuchará diligentemente y acudirá a fortificar tu corazón.
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Salmo 71:3
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“Sé tú mi roca fuerte a donde recurra yo continuamente. Has mandado que yo sea librado porque tú eres mi roca y mi fortaleza” (Salmo 71:3)
En ocasiones, el animo pasa de bajo a alto con solo enunciar con fe una alabanza. El señor llena de jubilo y felicidad a todos sus seguidores, por que su palabra en si misma tiene poder. Ese poder es el que necesitas para poder seguir adelante cuando ya no puedas más. Cuando estes triste, alaba a Dios y podrás sentir como entra a tu corazón para trabajar en él y quitar todo sentimiento negativo.
Isaías 40:29
“El da esfuerzo al cansado, y multiplica las fuerzas al que no tiene ningunas” (Isaías 40:29)
¿Cómo no adorar a Dios a cada momento? Si es nuestro aliado mas fiel. Quien nunca faltara ni dudara en llenarnos de fuerzas en cada batalla. Si sientes que tu aliento se agota y vez que vas perdiendo la batalla, habla con Dios. Él es fuente de justicia y sabiduría. Es el impulso y valentía que necesitas y más.
Genesis 28:15
“Date cuenta de que yo estoy contigo. Yo te protegeré por donde quiera que vayas, y volveré a traerte a esta tierra. No te dejaré ni un momento, hasta que hayas hecho lo que te he dicho” (Genesis 28:15)
Debemos tener en cuenta que Dios tiene un propósito para cada uno de nosotros. Cuando sientas que tu vida no tiene sentido o no va ninguna parte recuerda que Dios te trajo para cumplir una misión. Y no te descuidara en ningún punto del camino.
Salmo 27:1
“El Señor es mi salvación; ¿a quien podría yo temer? El Señor es la fortaleza de mi vida; ¿Quién podría infundirme miedo?” (Salmo 27:1)
Dios te invita a no flaquear ante ningún enemigo ni estorbo. Si conoces el gran poder que tiene sobre todas las cosas y sabes que siempre está a tu lado, serás imparable. El señor y su palabra es el pilar crucial para librar toda batalla, el te cubre bajo sus alas y no dejara que nada malo te ocurra.
Isaías 43:2
“Cuando pases por las aguas, yo estaré contigo; cuando cruces los ríos, no te anegarán. Cuando pases por el fuego no te quemarás, ni las llamas arderán en ti” (Isaías 43:2)
La promesa que nos ha hecho nuestro Dios es permanecer junto a nosotros en todo momento y todo lugar. En la adversidad y oscuridad, Dios es la luz al final del túnel. El prevalecerá y se mantendrá sin importar las circunstancias presentes y las que se avecinan. Nunca estas solo, cuando tu corazón esta con Dios.
2 Timoteo 1:7
“Por que no nos ha dado Dios un espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio” (Timoteo 1:7)
Dios nos ha dado el poder de decidir. Nos ha regalado la cualidad de tener valentía y poder sobre nuestras acciones para desempeñarlas según sus enseñanzas. No tengas miedo de atreverte a intentar cosas nuevas o enfrentar desconocidos retos, por que el Señor te a de acompañar a cumplir todos tus propósitos.
1 Juan 5:4
“Por que todo el que ha nacido de Dios vence al mundo. Y esta es la victoria que ha vencido al mundo: nuestra fe” (Juan 5:4)
Alguna vez debes haber escuchado que ‘’La fe mueve montañas’’. Ese es el poder que tienen todos los que cumplen la voluntad de Dios. En el momento que el Señor llega a tu vida, es para cambiarla y llenarte de nuevas energías y esperanzas. Recibe, entiende, esparce su palabra y no habrá adversidad comparada a tu fe.
Salmo 121:1-2
“Alzaré mis ojos a los montes: ¿De dónde vendrá mi socorro? Mi socorro viene del Señor, que hizo los cielos y la tierra” (Salmo 121:1-2)
Dios siempre tiene el poder sobre todas las cosas. Cuando tengas un momento de debilidad y angustia el Señor se compadecerá de tu dolor y pondrá en orden tu camino. No te desanimes y busca el amor de Dios que siempre tiene la respuesta a tus suplicas.
2 Samuel 22:33
“Dios es el que me ciñe de fuerza, y quien me despeja mi camin” (2 Samuel 22:33)
¿Quién como el todopoderoso para llenarte ímpetu? El te ha vuelto un guerrero y te ha forjado con valor y decisión para que afrontes las peores situaciones. No bajes tu cabeza ante el dolor, enfréntalo como un hijo de Dios: con fe. Dios es el motor de tu vida y quitara de ella todo lo que pueda lastimarte o distraerte de tu vocación.
Salmo 118:14
“El Señor es mi fortaleza y mi canción, el es mi salvación” (Salmo 118:14)
Esta declaración de amor a Dios nos permite alabarle y recordar todo lo que hace por nosotros. Busquemos la fuerza que nos falta en su palabra. Confiemos en cada proceso que pone en el camino. En Él encontraremos libertad y alegría.
