Los seres humanos nunca la han tenido fácil, han tenido que desarrollar millones de formas para poder salir adelante y evolucionar. Cuando alguien se refiere a la humanidad, la primera palabra en la mente es Fortaleza, tenemos la fortaleza de poder seguir adelante sin siquiera perder. No importa la lluvia, ni las tempestades o los problemas, gracias a la fe en Dios hemos aprendido a ser fuertes.
Nunca te guíes por el pensamiento de debilidad, aunque los humanos son físicamente débiles, la protección celestial entregada por Dios hacia ellos, los ha hecho de acero. Cada tarea, contratiempo, problemática o pelea, han sido enseñanzas de nuestro señor Jesucristo para desarrollar la fortaleza suficiente en nosotros. Nunca debemos dudar de la fuerza interna que nos otorgó nuestro señor, mientras nuestra fe sea fuerte, nosotros lo seremos.
Mejores versículos de la Biblia sobre Fortaleza:
Filipenses 4: 12-13
“Yo sé vivir tanto en las privaciones como en la abundancia; estoy hecho absolutamente a todo, a la saciedad como al hambre, a tener sobra como a no tener nada. Yo lo puedo todo en aquel que me conforta”. (Filipenses 4:12-13)
El ser humano ha sido creado para poder sobrevivir ante cualquier tempestad que lo rodee, sin importar las circunstancias. Dios nos ha enseñado, como hemos podido seguir viviendo, amándonos unos a otros, en tiempo de hambruna o de saciedad, en tiempos de abundancia, en los de privaciones. No importa la guerra ni el conflicto, siempre encontramos la luz al final del túnel.
Isaías 41:10
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“No temas, porque yo estoy contigo, no te inquietes, porque yo soy tu Dios; yo te fortalezco y te ayudo, yo te sostengo con mi mano victoriosa”. (Isaías 41:10)
Existen temporadas en nuestra vida, cuando colapsamos porque no encontramos la forma de seguir adelante. En esos momentos, es importante darse cuenta de que el problema es nuestro olvido sobre la protección otorgada por Dios. Él nunca nos abandona, ni nos deja morir en la miseria, a veces hay momentos en los que se puede sentir como su ayuda puede ser tardía. La razón es que, en esos momentos, aún no ha llegado el momento indicado.
Éxodo 15:2
“El Señor es mi fuerza y mi protección, él me salvó. Él es mi Dios y yo lo glorifico, es el Dios de mi padre y yo proclamo su grandeza”. (Éxodo 15:2)
Un factor muy fundamental obligatorio en la cultura de la humanidad es el agradecimiento. Muchas de los avances construidos por nosotros mismos, han sido debido a que el señor de los cielos ha puesto su mano como forma de apoyo. Esos momentos cuándo no encuentras salida de la penumbra, Dios siempre te sacará de ahí, sin importar las circunstancias.
Efesios 6:10
“Por lo demás, fortalézcanse en el Señor con la fuerza de su poder”. (Efesios 6:10)
Los mandamientos del señor, nos han demostrado que la mejor ayuda que podemos conseguir alrededor de nuestro universo, es la de nuestro Dios todopoderoso. La fortaleza que necesitamos, está en las oraciones realizadas por nosotros mismos de rodillas, implorándole a Dios su ayuda perfecta. Todo lo que buscas de la fuerza, te lo otorgará Dios de la forma que tú lo deseas, quizá no al instante, pero sí en el mejor momento.
1 crónicas 16:11
“¡Recurran al Señor y a su poder, busquen constantemente su rostro!”. (1 crónicas 16:11)
La mejor manera de poder escapar de todas las tinieblas y la maldad del universo, es recurriendo a nuestro señor. En cada problemática ocurrida durante nuestra vida, el camino fácil para escapar y salvarse de la desdicha, es buscar el rostro del señor entre todo el mal del problema. Nunca encontrarás la paz en todos los problemas, si solo buscas soluciones ortodoxas, cuándo en realidad puedes sentarte y rezar a nuestro señor pidiendo ayuda.
2 Timoteo 1:7
“Porque el Espíritu que Dios nos ha dado no es un espíritu de temor, sino de fortaleza, de amor y de sobriedad”. (2 Timoteo 1:7)
Un error cometido por muchas personas, es que cuando creen en Dios, igual se llenan de miedo y temor por cualquier circunstancia problemática. Es el peor error cometido por la humanidad, Dios es un reflejo o un símbolo de valentía, nunca hay que temer ante las tinieblas si Dios está con nosotros.
Salmo 34:17
“Pero el Señor rechaza a los que hacen el mal para borrar su recuerdo de la tierra”. (Salmo 34:17)
La mejor simbología de poder, es tener la suficiente fortaleza como para ser buena persona con todos y dejar un buen recuerdo en la humanidad. Las personas débiles, esforzadas en hacer el mal contra la humanidad, para eliminar su recuerdo de aquí e ir directamente el cielo, son rechazadas en el reino de Dios.
1 Timoteo 1:12
“Doy gracias a nuestro Señor Jesucristo, porque me ha fortalecido y me ha considerado digno de confianza, llamándome a su servicio”. (1 Timoteo 1:12)
El señor todopoderoso vela por ti, cuándo tú no lo puedes hacer por ti mismo. Es quien cura la enfermedad y quien te saca de los problemas. Gracias a él tenemos la fortaleza suficiente para nadar contra corriente.
1 corintios 1:18
“El mensaje de la cruz es una locura para los que se pierden, pero para los que se salvan –para nosotros– es fuerza de Dios”. (1 Corintios 1:18)
Quien posee una cruz colgando en su pecho, o la persona que lleva ese crucifijo consigo para todas partes, es quien va a estar más cerca de dios y protegido por su identidad. Ojalá pudieran entender la gente alejada del camino celestial que la única forma de protegerse es siguiendo a nuestro señor.
Salmo 62:2
“Sólo en Dios descansa mi alma, de él me viene la salvación”. (Salmo 62:2)
Nuestra alma siempre va a estar encontrada en un proceso de protección, porque descansa diariamente bajo el manto de nuestro señor.
Zacarías 4:6
“Entonces respondió y me habló diciendo: Esta es palabra de Jehová a Zorobabel, que dice: No con ejército, ni con fuerza, sino con mi Espíritu, ha dicho Jehová de los ejércitos”. (Zacarías 4:6)
No hay fuerza capaz de derrumbar las barreras puestas por Dios entre tú y lo malo, no importa nada, mientras estés con Dios. Lo único capaz de defenderte totalmente siempre será Dios.
