Mejores Versículos de la Biblia sobre Ánimo y Fortaleza:
Quizás sientas que ya no puedes más y te hayas quedado sin ganas de luchar. Hay situaciones en las que resulta fácil perder el ánimo al estar solo y no entender lo que está pasando. Así mismo, se nos vuelve difícil llenarnos de fortaleza para luchar. Quizás este artículo era justo lo que necesitabas encontrar para recobrar el ánimo y la fortaleza.
No estás solo. Dios siempre te acompaña y nos ha dejado unas escrituras para llenarnos de ánimo y fortaleza en nuestras luchas más difíciles. Confía en él y en tu capacidad para superar cualquier adversidad. Cree en ti mismo. Te invito a leer estos 11 versículos a continuación con la esperanza de que te ayuden a recobrar las fuerzas para seguir luchando.
Isaías 41:10
“No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes, porque yo soy tu Dios que te fortalezco; siempre te ayudaré; siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia”. (Isaías 41:10)
Dios nunca te desamparará y siempre estará contigo. Ora y pídele a Dios que te llene de fortaleza. Pídele con fe y tus oraciones serán escuchadas. Refúgiate en las oraciones y en el poder infinito de Dios en todo momento.
Salmos 23:4
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“Aun si voy por valles tenebrosos, no temo peligro alguno porque tú estás a mi lado; tu vara de pastor me reconforta”. (Salmos 23:4)
Si vas por la vida confiando en Dios y creyendo en su palabra, verás como nunca más perderás la fortaleza ni el ánimo. Al sentirte desanimado y sin esperanzas, te recomiendo que trates de dejar los temores a un lado y busques fortaleza mediante las oraciones.
Mateo 28:18
“Y acercándose Jesús, les habló, diciendo: Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra”. (Mateo 28:18)
Al final, si Dios quiere que ocurra algo y se te de algo, así será. Recuerda que es él quien tiene el poder sobre todas las cosas. Es él quien permite se te abran los caminos o se te cierren. Recobra los ánimos y recuerda que todo llega a su momento. No hay nada fácil en esta vida y siempre hemos de luchar para alcanzar nuestros sueños.
Josué 1:9
“Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque Jehová tu Dios estará contigo dondequiera que vayas”. (Josué 1:9)
Puedes repetirte este versículo cada vez que te sientas solo y necesites recobrar los ánimos. A veces olvidamos que en realidad nunca estamos solos, nuestro Dios está acompañándonos en todo momento. Cree en tu capacidad de lograr las cosas. No lo defraudes y no te rindas.
Juan 16:33
“Yo les he dicho estas cosas para que en mí hallen paz. En este mundo afrontarán aflicciones, pero ¡anímense! Yo he vencido al mundo”. (Juan 16:33)
Jesús no perdió la fuerza en ningún momento pese a estar a punto de ser crucificado. Él siempre mantuvo la fortaleza y esperanzas en su padre, nuestro Dios. Siempre nos encontraremos con problemas y situaciones desagradables, pero hemos de buscar la manera de enfrentarlas y superarlas.
Salmos 27:1
“El Señor es mi luz y mi salvación, ¿a quién temeré? El Señor es el baluarte de mi vida; ¿quién podrá amedrentarme?”. (Salmos 27:1)
Si estás del lado de nuestro Dios, nunca más volverás a dudar de ti ni a dejar que alguien más te haga dudar de ti mismo. Es en Dios en quien más debes confiar y quien te sacará de cualquier situación difícil.
1 Tesalonicenses 5:11
“Por eso, anímense y edifíquense unos a otros, tal como lo vienen haciendo”. (1 Tesalonicenses 5:11)
Así como tú a veces necesitas ánimos y llenarte de fortaleza, nuestros familiares y amigos también. Todos hemos pasado o estamos pasando situaciones difíciles. Ayuda a esa persona que ves se está quedando sin ánimos de seguir luchando como te hubiese gustado que te ayudaran a ti. No desamparemos a nuestros seres queridos y apoyémoslos.
Salmos 32:8
“El Señor dice: «Yo te instruiré, yo te mostraré el camino que debes seguir; yo te daré consejos y velaré por ti”. (Salmos 32:8)
Sigue tu camino de mano del Señor. Confía en que él te está llevando por el mejor camino para ti. No siempre el camino que queremos resulta ser el mejor y por eso es que el Señor nos cierra las puertas en ocasiones. Recuerda esto cuando te sientas triste o afligido porque algo no te salió como lo planeabas.
2 Corintios 4:16
“Por tanto, no nos desanimamos. Al contrario, aunque por fuera nos vamos desgastando, por dentro nos vamos renovando día tras día”. (2 Corintios 4:16)
Aunque sintamos que ya no podemos más y no hay forma ni manera de manejar la situación que estamos atravesando, sigamos orando. El orar te ayudará a irte fortaleciendo cada día más y más hasta volverte indestructible, hasta que no haya situación que no nos creamos capaces de superar.
Proverbios 4: 23
“Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón; porque de él mana la vida”. (Proverbios 4: 23)
Mantén siempre la fe en Dios. Perdona a quien tengas que perdonar y ama a quien tengas que amar. Es difícil mantener los ánimos y la fortaleza cuando tenemos un corazón lleno de odio y rencor. Es aún más difícil cuando nos comparamos con otros y llenamos nuestro corazón de envidia. No te compares, todos estamos viviendo a distintos ritmos. Solo confía en ti y sigue adelante lucha.
Mateo 9:6
“Pues para que sepáis que el Hijo del Hombre tiene potestad en la tierra para perdonar pecados (dijo entonces al paralítico): ¡Levántate!, toma tu lecho y vete a tu casa”. (Mateo 9:6)
No te quedes estancado en el problema. Busca soluciones, busca otro camino, busca otra manera. No tengas miedo de pedir ayuda o compañía de ser necesario. Habla con un amigo o familiar, desahógate. Pídeles su punto de visto con respecto a la situación que estás atravesando, capaz te hacen ver algo que no has estado viendo. Oblígate a levantarte y a seguir luchando.