Explicación de Juan 1:36

Escucha el capítulo completo: 🔊

Volver al Libro Juan

Versículo Anterior | Versículo Siguiente

Explicación del Versículo 36, Capítulo 1, Libro de Juan del Nuevo Testamento de la Biblia. Autor: Juan.

Versículo Juan 1:36

‘Y mirando a Jesús que andaba por allí, dijo: «¡Este es el Cordero de Dios!’

Juan 1:36

Versículo Anterior | Versículo Siguiente

¿Qué significa Juan 1:36?, su importancia y mensajes que podemos aprender con este versículo:

Juan 1:36: El Cordero de Dios

El evangelio de Juan es uno de los evangelios sinópticos de la Biblia, y en el primer capítulo utiliza una metáfora potentísima para describir a Jesús: "El Cordero de Dios". Juan el Bautista, quien realizó un bautismo de arrepentimiento en el río Jordán, reconoció a Jesús cuando lo vio caminando por allí. En ese momento, señalando a Jesús, dijo: "¡Este es el Cordero de Dios!" (Juan 1:36).

¿Qué significa "Cordero de Dios"?

La afirmación de Juan el Bautista de que Jesús es el Cordero de Dios se basa en la tradición judía. En el Antiguo Testamento, el cordero era el animal sacrificado para el perdón de los pecados. El cordero también se asociaba con la Pascua, cuando se sacrificaba un cordero y se rociaba su sangre en los postes de las puertas para proteger a los hijos de Israel de la muerte. (ver Éxodo 12:1-13).

Tienes dudas? pregunta aquí:

(o continúa leyendo)

Jesús es el Cordero de Dios en el sentido de que se sacrificó por nosotros para que pudiéramos ser perdonados por nuestros pecados. A través de su muerte y resurrección, Jesús se convirtió en la expiación perfecta por nuestros pecados y nos otorgó el perdón completo y la reconciliación con Dios.

Reflexiones sobre el Cordero de Dios

La metáfora del Cordero de Dios apunta a la naturaleza pacífica de Jesús, quien no resistió ni luchó contra la injusticia, sino que se entregó a la muerte en nuestros papeles como un sacrificio perfecto. En lugar de buscar la venganza o la justicia por su propia cuenta, Jesús recurrió a la pasividad y la humildad en todas las situaciones.

La idea de que Jesús es el Cordero de Dios es también importante para entender la naturaleza de la expiación. A través de su muerte, Jesús nos liberó de la culpa y la vergüenza impuesta por el pecado, y nos dio acceso al amor y la gracia de Dios en su lugar. Nos abrió un camino hacia la reconciliación con nuestro Creador, un camino que no podríamos haber encontrado de otra manera.

Aplicación en nuestra vida

Si bien la metáfora del Cordero de Dios se remonta a la tradición judía, su relevancia se extiende a casi todas las culturas y religiones. Es un llamado a la humildad y la pasividad incluso en tiempos de lucha y conflicto. La idea de que no debemos tomar venganza o actuar por nuestra cuenta, sino que debemos confiar en la justicia divina, es una valiosa lección para todos.

Además, "El Cordero de Dios" nos recuerda que nunca estamos solos en nuestras luchas. Jesús se unió a nosotros en nuestra humanidad y caminó por nuestro lado en toda nuestra experiencia humana. Podemos encontrar consuelo y esperanza en su presencia.

Resolviendo dudas

Una pregunta común que puede surgir sobre este versículo es: ¿Por qué Juan el Bautista llamó en particular a Jesús el Cordero de Dios? En la tradición judía, los profetas a menudo utilizaban metáforas para explicar o describir a los líderes y los eventos históricos. Juan el Bautista expresa que Jesús con su sacrificio sería capaz de salvar al mundo del pecado.

También es importante aclarar que cuando hablamos de que Jesús es un cordero, no significa que sea débil. En la Biblia, los corderos eran animales fuertes y resistentes, capaces de sobreponerse a las adversidades y sobrevivir en climas extremos. Del mismo modo, la metáfora del Cordero de Dios apunta a la pasividad, el coraje y la fortaleza que caracterizó a Jesús en todo momento.

Conclusión

En resumen, Juan 1:36 nos enseña la valiosa metáfora de Jesús como El Cordero de Dios, quien se sacrificó por amor a cada uno de nosotros para salvarnos de nuestros pecados. Cada uno de nosotros puede aplicar esta lección a nuestras vidas, buscando la humildad y la pasividad en nuestras luchas diarias y confiando en la justicia divina para encontrar la esperanza y la reconciliación sin importar lo que suceda.

Reflexión Corta: El Abrazo del Cordero

Al contemplar el profundo significado de ser el Cordero de Dios, recordamos que su sacrificio no solo fue una acto de amor divino, sino un abrazo eterno que nos envuelve en perdón y esperanza. En nuestras luchas cotidianas, encontramos consuelo en saber que Jesús camina a nuestro lado, invitándonos a dejar de lado la venganza y a abrazar la paz que solo Él puede ofrecer. Su entrega nos llama a vivir con humildad y a buscar la justicia divina, recordando que, en su sacrificio, somos restaurados y amados incondicionalmente.

Versículo Anterior | Versículo Siguiente

Significado e interpretación del Versículo 36 del capítulo 1 de Juan de la Biblia:

Versículo Anterior | Versículo Siguiente

Deja un comentario

boton de seguirnos en el canal de whatsapp de Bibliabenditaboton para descargar biblia en español en PDF online chat blíblico, asistente virtual para resolver dudas sobre los versículos de la biblia Versículo Aleatorio